Una de las circunstancias que hacen que en los hogares se dificulte la obtención de una buena remuneración es el bajo nivel de educación.
En los Estados Unidos podemos ver que hay 10 millones de niños que viven en hogares en donde no existe la capacidad económica de cumplir con los requisitos mínimos para cubrir la totalidad de los gastos más necesarios de la familia. Prácticamente la mitad de estos hogares con privaciones económicas. Según la Fundación Annie E. Casey, entiende que cumplir con una buena educación durante la niñez como con un entrenamiento adecuado para el trabajo a los padres, ayudaría en buena medida a salir de la pobreza en que se encuentran muchos hogares.
El presidente y director ejecutivo de la fundación mencionada, Patrick McCarthy, advierte: “que se ha estado demasiado tiempo analizando la pobreza en compartimentos separados: por un lado los adultos y los niños por otro”. Agrega que no “se establecía las necesidades comunes que existían”. Y agrega que: “estamos viendo la importancia de combinar lo que se ha descubierto en las áreas tomadas en forma separada a fin de poder romper el ciclo vicioso que hace no poder tomar las medidas adecuadas para la eliminación de la pobreza en los hogares”.
Hay varios factores que participan para que el ciclo de la pobreza se retroalimente, y suele estar basado principalmente en la incapacidad de los padres de lograr tener una educación superior, lo que hace que solo consigan trabajos de muy baja remuneración como para poder cubrir las necesidades de un hogar con niños; también tienen su importancia la raza o los orígenes étnicos. Por lo expuesto, los hijos de padres con carencias, con el tiempo recorren el mismo camino en su vida económica que transitaron sus padres... Continuar leyendo en "Formas de poder eliminar ese destino recurrente"